jueves, mayo 22, 2014

Para tener presente

No importa quién lo dice, sino lo que se dice. Bueno, por lo menos en este caso en particular, y en lo que hace a las ideas expuestas en este video. En todo caso, lo que quiero destacar es que no se trata solamente de qué somos, sino además de precisar quiénes somos. Parte de esta constitución identitaria deriva directamente de aquello que los demás ponen en nosotros, en tanto individuos con cierta autonomía, a través de su juicio crítico, a través de su mirada... Pero otra parte se deriva directamente de aquello que nosotros mismos hacemos, a través del ejercicio de nuestra libertad. Somos quienes decidimos ser y hacer; y somos también aquello que los demás fijan en nosotros a través de sus juicios. "Somos -dice Jean Paul Sartre- aquello que hacemos con lo que los demás hacen de nosotros."




8 comentarios:

Francisco dijo...

El programa Filosofía Aqui y ahora y los artiuculos sobre el peronismo (en clave de lectura critica, escritura acida y empapada de filosofia) que publicaba en pagina 12 me han formado mucho más que mis años de facultad. Creo que si de Sartre hablamos, importa tanto que dice, como quien dice, cuando y dónde. jaja.

Agustina N dijo...

Sobre la última clase, y antes de que lo olvide, comparto un link de una historieta que va sobre cuál distopía se cumplió: si la de Orweel en "1984" o Huxley en "Un mundo feliz". Yo, al igual que el autor de la historieta, creo que estamos más cerca del soma que del Ministerio del Amor.
http://pedacicosarquitectonicos.com/2013/08/30/orwell-vs-huxley-la-explicacion-de-por-que-nadie-hace-nada/

eva dijo...

para mí el tema de la identidad es complejísimo. Elegimos, no elegimos, elegimos dentro de estructuras, podemos reinventarnos, no podemos, etc. Podemos desarmarnos, dejar sólo lo fundamentalmente nuestro pero, ¿qué es eso fundamental, de dónde sale? Si me pongo a pensar, ni siquiera elegí nacer y lo que conforma mi identidad es mezcla de influencias y una serie de decisiones. Decisiones que también están definidas por las primeras influencias porque, sea que busque lo igual o lo diferente, será a partir de algo que no elegí.
Este programa me parece genial y a propósito de Jean Paul: "La identidad no es una pieza de museo, quietecita en la vitrina, sino la siempre asombrosa síntesis de las contradicciones nuestras de cada día."

Le comparto un tema del Cuarteto de Nos (que también fue lo que pensé la primera clase, cuando hubo que presentarse). La idea es la de un flaco en una de esas entrevistas que te piden una definición en 3 oraciones, como si fuera remotamente posible.
https://www.youtube.com/watch?v=KpsPNpwpKkE

En cuanto al tema del otro día (a propósito de la historieta que compartió la compañera), me parece que Farenheit 451 es un libro entre medio de los 2 debatidos en clase: está todo bien hasta que dejes de ser un bobito que mira la tele y es feliz con eso. Yo qué sé.

Ángel dijo...

Me parece que la parte de la "decisión individual" de Sartre, esa postura de "yo, ultra consciente de mí mismo, teniendo pleno conocimiento de la responsabilidad que me otorga mi libertad, actúo en la realidad, me "comprometo", etc" siempre me pareció ligeramente pedante. No sé si tenemos la capacidad de influir o modificar algo (o modificarnos) de manera tan cartesiana y omniconsciente. Lo dudo. Estamos en el medio de miles de "cargas", "pesos" "obligaciones", "limitaciones" de nosotros mismos y del ambiente en el que estamos inmersos. No somos todos brillantes filósofos franceses, ni siquiera algunos pocos de nosotros lo son. La fragilidad, la inconsciencia, la estupidez, la irresponsabilidad "gobierna" (si es que se puede decir así) nuestras acciones. Seguimos existiendo de casualidad. Jajajaja.

Unknown dijo...

Eso de que un día vamos a tener que decir "una palabra nueva" y esa va a ser la "libertad" me hace ruido... ser capaz de nominar algo no me parece sinónimo de libertad. Considero que todos tenemos libertades relativas, pero siempre seremos sujetos sujetados a miles de cosas (-fisicas, corporales, mentales, históricas, geográficas, situacionales y la lista sigue y sigue), el tema está en ver qué hacemos con esas cosas y analizar cómo cada uno se considera a si mismo, en sus múltiples dimensiones. Otra cosa que me surge con todo esto es: por un lado, somos seres cambiantes, todo el tiempo "en construcción", por el otro, una definición es algo estático, una cristalización: lo que soy hoy, voy a ser mañana, en un año, en 10? Ahi también, me parece, radica la dificultad de la definición...

Pablo Sturba dijo...

Ante todo, buenísimo el aporte de la historieta sobre Orwell y Huxley que publicó la compañera. Relaciono el tema con la música, y la diferenciación entre compositores e intérpretes. El intérprete, el que reproduce con la mayor exactitud posible la obra de otro/s. El compositor, el que toma elementos preexistentes, los reordena, los elabora, entabla vínculos, los mezcla, opera con ellos y forma un nuevo resultado. Único e innovador. Pienso que el ser humano, en general, funciona como un compositor. Totalmente en conexión con el "otro", todo ser vivo necesita descubrir dos mundos: el mundo natural, que puede acercarse a él con los sentidos innatos de nuestra condición animal. Y el mundo social, humano, construido, que tiene otras leyes y estructuras. Necesitamos del "otro" para acceder, en gran medida, a ellas.

Anónimo dijo...

Dejo link para ver la película a la que hicieron referencia hoy en la clase. Saludos.

http://www.sipeliculas.com/the-purge

Erika Ramirez dijo...

Gracias Agustina, por la historieta esta muy buena junto con el video permiten una relacion interesante.
La que mas me gusto del video es aquello que hace referencia de hacernos cargo de la responsabilidad que tenemos de nosotros mismos; a pesar de estar inmersos en una cultura en la cual hay un lenguaje, valores, etc que determinan quienes somos pensar que se puede permitir el hombre salir de ella, me parece que es un punto interesante. Simplemente hay que hacerse cargo de nuestras acciones y buscar esa libertad.
Todos nos debemos permitir decir libremente ¡ que trabajo de mierda que tengo!. el tema es ver si luego me siento en el mismo escritorio o logro desprenderme de esa realidad.