jueves, agosto 16, 2007

Del cuaderno de bitácora (Here we go again...)

A confesión de parte relevo de prueba: tuve que preguntarle a una alumna de otro cuatrimestre si las clases comenzaban esta semana o la otra. Suerte que uno tiene esta clase de contactos dentro de la facultad, porque de lo contrario todo sería más difícil.

Por lo demás, las comparaciones siempre son odiosas. Al menos esto es lo que habitualmente se dice. Aunque si vamos a comparar, debe haber cosas mucho más odiosas que las comparaciones. Pero vamos al punto: lo que quería decir, sin ánimo de establecer comparaciones (que por otra parte serán inevitables), es que disfruté mucho del cuatrimestre anterior, que fue particularmente movilizador, lo cual abre una expectativa especial en lo que respecta a éste.

Entonces, como una especie de cábala, me voy a permitir comenzar esta cursada repitiendo el texto con el cual arranqué el cuatrimestre anterior. Es un texto de George Steiner, del libro "Lecciones de los maestros", y puede tomarse tanto como una bienvenida o como una reflexión acerca de la naturaleza del ejercicio docente.

En todo caso, sé que me arriesgo a que me comparen con otros docentes que, de tener un blog como éste, acaso no repetirían lo dicho en ocasiones pasadas. En fin, ya se sabe: las comparaciones son odiosas... pero inevitables.

“¿Qué es lo que le confiere a un hombre el poder para enseñar a otro ser humano? ¿Dónde está la fuente de su autoridad? Por otra parte, ¿cuáles son los principales tipos de respuesta de los educados? Estas cuestiones desconcertaron a San Agustín y aparecen con toda su crudeza en el clima libertario de nuestra época."

“Simplificando, podemos distinguir tres escenarios principales o estructuras de relación. Hay Maestros que han destruido a sus discípulos psicológicamente y, en algunos raros casos, físicamente. Han quebrantado sus espíritus, han consumido sus esperanzas, se han aprovechado de su dependencia y de su individualidad. El ámbito tiene sus vampiros. Como contrapunto, ha habido discípulos, pupilos y aprendices que han tergiversado, traicionado y destruido a sus Maestros. Una vez más, este drama posee atributos tanto mentales como físicos. Recién elegido rector, Wagner triunfante desdeñará al moribundo Fausto, antaño su magíster. La tercera categoría es la del intercambio: el eros de la mutua confianza e incluso el amor (es el caso del discípulo amado de la Ultima Cena). En un proceso de interrelación, de ósmosis, el Maestro aprende de su discípulo cuando le enseña. La intensidad del diálogo genera amistad en el sentido más elevado de la palabra.” (…)

“Evidentemente, las artes y los actos de enseñanza son, en el sentido propio de este término, tan denostado, dialécticos. El Maestro aprende del discípulo y es modificado por esta interrelación en lo que se convierte, idealmente, en un proceso de intercambio. La donación se torna recíproca.”

7 comentarios:

Anónimo dijo...

"La donación se torna recíproca."
Así es...

Buena suerte para este cuatrimestre...!!!

Anónimo dijo...

¿Vos decís para ellos o para mí, Manu?...

Germán A. Serain dijo...

P.S.: Tendrías que hacer un blog propio, Manu. "Manulandia" es título de blog. O de novela. O de algo. No dejes pasar la ocasión.

Anónimo dijo...

G.S.

Para ambos... la donación es recíproca... es decir.. vos nos das y pareciera que nosotros también te damos algo...

Digo pareciera porque no soy una docente "hecha y derecha" (?¿)... sin embargo me animo a decirlo porque las pocas oportunidades en que tuve la posibilidad de estar del "otro lado" fue muy gratificante...

Ya va a llegar ese blog... todavía estoy pensando qué escribir en mi primer entrada...

Saludos!


pd: prometo escribir en algún lado la contraseña! jaj

Germán A. Serain dijo...

Decís bien, Manu.

ps: cuando quieras. I'll be waiting for it.

Anónimo dijo...

Hola German,
Te queria desear...Buen comienzo!!!!
Gracias por dejarnos ese "algo" tan iomportante que te agredeceré en cada ocasión.
Te queria contar que finalmente elegí el texto de Fontanarrosa para realizar el TP de radio.
Cuando pueda enviarte el audio por mail lo hago así lo podes escuchar.
Besos,
Jime.-

Anónimo dijo...

Hola, Jimena! Gracias por pasar y (esto entre nosotros) te digo que hasta ahora los pibes nuevos vienen más bien de perfil bajo, por así decirlo.

Me alegro que mi consejo sobre el texto del negro haya rendido frutos y sí, cuando quieras mandalo que va a ser divertido escucharlo.