Recuperatorio teatral

Hay una sentencia que a menudo ha estado en boca de ciertas tías, abuelas y por qué no también madres, que asegura que "no hay mal que por bien no venga". Yo no sé si esto será o no estrictamente así. Pero por lo menos el tema este del paro sirvió para generar un debate que yo quiero creer que debe haber servido de algo, al menos para escuchar voces de uno y otro lado, diferentes de la nuestra. Pero es necesario retomar ahora el curso de la materia y recuperar el tiempo perdido. El primer movimiento en este sentido ha sido el video de Feinmann que aparece en la anotación previa a ésta: 06:43 minutos recuperados, con un invitado polémico, pero que sin duda dice cosas interesantes.

El tema, introducido por el texto de Finkielkraut y por la frase de Sartre traída a colación por el video, es el nuevo tema a tratar. Quiénes somos. Cómo este proceso identificatorio con una determinada identidad es un proceso que es puesto en juego por uno mismo en relación con los otros. Ya veremos también la cuestión del hedonismo, que ha quedado por el momento ahí pendiente, vean más abajo. No se apresuren, que hay para todos.

Pero esta mañana me dí cuenta de que 06:43 minutos contra los 120 que debíamos haber tenido era demasiado poco. Así que un poco a la manera de un émulo de Proust, sólo que con mucho menos talento para la escritura, voy por más y les propongo un recuperatorio especial, de 80 minutos. ¿Dónde y cuándo?... En el Teatro Regio, que queda en Av. Córdoba 6056, este sábado o domingo a las 16:00, como vos prefieras, que ambos días hay función. Ahí están dando una obra de títeres, teatro de objetos en realidad, una adaptación de Cyrano de Bergerac de Edmond Rostand. La puesta está indicada como teatro para chicos, de ocho años en adelante... Yo no sé. No me parece una obra precisamente infantil. Pero si querés podés ir con tu sobrinito, o bien con tu chico o chica, que al fin y al cabo la obra en cuestión de amores trata.

"Pero, ¿es obligatorio ir?..." (me anticipo, por las dudas.) Y te digo: no me jodas con esa clase de preguntas, please. Es cierto que para el caso daría CASI lo mismo que agarres el libro de Rostand y lo leas. O que veas algunas de las muchas versiones para cine que se han hecho de esta historia. Pero la puesta de Tito Lorefice en el Regio tiene algunas particularidades que son de por sí interesantes y que nos van a servir para trabajar con algunas otras temáticas más adelante.

No hay mal que por bien no venga. De no haber sido por el paro, acaso no se me hubiese pasado por la cabeza realizar esta consigna con ustedes. O sea...