lunes, octubre 30, 2006

Ariel Dorfman tenía razón...

Para quienes tengan problemas para visualizar el video o escuchar su audio desde esta págna, pueden probar de verlo a través de este link. La caricatura se titula Der Fuehrer´s Face y es del año 1943.

Y a pedido del público, les paso también el link para visualizar el segundo video, titulado The Spirit of '43, en el cual el Tío Sam intenta convencer al Pato sobre la conveniencia de pagar sus impuestos. Pueden verlo haciendo click aquí.


Banned Disney Cartoon - Donald Duck -


Un integrante de la comisión me pasó este video, del Pato Donald, como corolario a algunas cosas que estamos viendo respecto de la construcción de la realidad. De más está decir que no simpatizamos con el nazismo... ni tampoco somos pro-yanquis. Pero me pareció interesante compartir este video con todos.

16 comentarios:

Anónimo dijo...

Es muy gracioso como a Donald el régimen trata de ideologizarlo primero y termina volviéndose loco al final.

Es más gracioso inclusive que el método de producción sea fordista, que es el mismo que se utilizó durante la WWII en USA también. Ahora que lo pienso, hay otro cartoon bastante bueno de Donald siendo seducido por Tio Sam y es raro que no termine igual de loco. Ese es mucho más violento que el nazi, podría perfectamente llevarse a conceptos de Foucault.

Pero más curioso todavía es el principio, toda la iconografía de las esvásticas por todos lados! Las nubes, los cables, el cielo.

La esvástica era una cruz utilizada mucho antes del régimen nazi por otras culturas, y es bastante notable como consituyó un taboo y fue completamente demonizada post segunda guerra mundial. Y si bien el dibujo es pro-yankee, es demasiado heavy ver tanto nazismo junto. No creo que fuera visto como un símbolo de muerte durante la guerra, sino como un ícono político más. Es interesante como cambió a lo largo de la historia.

Anónimo dijo...

No puedo ver el video, me aparece un cuadrado blanco.... pero imagino que debe estar bueno :(
Saludos

Anónimo dijo...

esta bueno, pero obviamente le falta la segunda parte de la historia, cuando donald se vuelve loco por razones parecidas en territorio yanqui, repitiendo palabras como democracia,libertad y lucha frente al terrorismo, una y otra vez y vacias de sentido.

Anónimo dijo...

En base a lo que decís Santiago, recomiendo como lectura complementaria: "Para leer al Pato Donald" de Dorfman y Mattelart.

Realmente disfruté mucho leyéndolo, no sólo como lector de comics, también como estudiante de comunicación. En Prometeo lo consiguen, creo que no pasa los treinta mangos.

Si no están al tanto de qué trata, les dejo un review que hacen en un sitio (pretty accurate, no sé si no lo sacaron de la contratapa):

"Concebido como un manual de descolonización, Para leer al Pato Donald trata de deconstruir la ideología imperialista subyacente en las relaciones entre los personajes del cómic de Disney, comparadas con las propias condiciones de trabajo de los empleados de la compañía. Estos últimos quedan convertidos en trasunto de los indígenas y sobrinos de la historieta (Huey, Dewey y Louie). Para Dorfman y Mattelart, detrás de la máscara del mito Disney se esconde el insoslayable mensaje propagandístico del imperialismo cultural, del capitalismo estadounidense y del mítico "American Way of Life."

Según los autores, el conflicto maniqueísta entre los personajes nunca tiene una base social porque se han eliminado todas las formas de producción (material, sexual e histórica). Simplemente, se trata de representar la superestructura ideológica de una sociedad capitalista avanzada, cuyo único futuro posible es la supremacía del sector terciario (de servicios) como clase. A este efecto, las fuerzas históricas y el sector secundario o productivo quedan eliminados. Por el mismo camino, el Tercer Mundo acaba siendo un parodiado juguete del Primero, que importa--al mismo tiempo que los productos manufacturados--su sistema axiológico. Los cómics son realmente un manual de instrucciones para los pueblos subdesarrollados sobre cómo han de ser sus relaciones con los centros del capitalismo internacional. En definitiva, el cómic de Disney no es mero entretenimiento sino una burla explícita de las condiciones de dependencia y explotación de la periferia por parte de los centros de decisión, representados por el tío Scrooge McDisney. Es más: su objetivo final es promocionar el subdesarroyo. No obstante, la obra se ha criticado en múltiples ocasiones. Por ejemplo, para Salvador A. Oropesa, "lo que intentan Dorfman y Mattelart es dejar intacta la estructura social de la burguesía (como en Moros en la costa) y cambiar sólo el nombre de la gente a desempeñar la función, sobre todo con el espejismo del proletariado" (170)."

Anónimo dijo...

Yo que hi visto mucho dibujo, Fantastico hallazgo! Y es interesante como la imagen habla por si sol,a creo que cualquiera puede interpretarlo inclusive sin existir subtitulos.
Reflexiones: Primero creo que el final tiene mucha significación, la construccion e ideogilizacion del regimen nazi que se hace a lo largo del episodio queda sentenciada por la imagen del final: EEUU un pais primordialmente libre. Esto acentuado por la imagen de la estatua de la Libertad y Donal abrazando esa libertad. Lo otro que me parecio llamativa es algo que mencionaron antes y que tiene que ver con el modo de producción que aparece. Por que? Me parece que asi como se trata de una construccion de la realidad a partir de una mirada especifica, podria decirse que el regimen nazi queda reducido a una esclavitud de las personas al modo de producción, cuando en realidad todos sabemos que abarca un par de “cosas” mas…..Asi como tambien es un modo de producción tipico de EEUU, del cual el episodio intentar atribuir como exclusivo de este regimen.
Se trata en definitiva de la reinterpretacion de acontecimientos, no?

Anónimo dijo...

Aparte de analizar la construcción ideologizada del nazismo por un lado (disciplina, símbolos, reglas, gritos, fábricas y cadena de montaje, ausencia de buen alimento o del más apatecible, etc.) y de los americanos salvando al mundo, o como dijo Lucas muy claramente "Donald abrazando esa libertad" como representante yanqui de lo que ellos son para el mundo, lo que más me impresionó es la capacidad que tienen para trasmitirlo. Los productores del cartoon y el medio...y Disney, ven la realidad de una forma, y lo increible para mi, es la manera en que lo plasman. Hay partes en las que hasta me reí y me distrajo, amén de estar analizándolo al mismo tiempo. Quiero decir, en esto soy consciente de lo que se transmite y percibo huellas muy claras de la idelogía que se imparte (lo que no quiere decir que haya captado todas, se entiende)...pero qué miedo me da cuando me pongo a pensar EN SERIO en todo lo que se nos escapa a la percepción cuando consumimos representaciones del mundo. Y no solo hablo de mediatizaciones, también me refiero a nivel más micro. Eso es lo que me dejó pensando después de ver el video.

Anónimo dijo...

No se como sigue la secuencia en los 2' finales; porque se me "cuelga" en video.
¿Alguien puede decirme como termina?.

Anónimo dijo...

Increible el segundo video. evidentemente cuando empiezan las guerras se acaban las sutilezas.

muy gracioso como las "American factories" trabajan "day and night" sin un solo empleado, obviamente no iba a pretender q aparezca algun proletario explotado como el donald aleman, pero la secuencia de la maquinas trabajando sin un solo trabajador supero mis expectativas.

increible tambien el grito desaforado de la voz en off, "Guns, guns, all kinds of guns!" y pareciera q tiene un orgasmo mientras vemos como se fabrican las armas "to beat the evil destroyer of freedom and peace" (o algo asi).
evidentemente algo de esto les quedo bastante grabado a algunos amigos del norte (que ya ni siquiera son originales con los discursos)

pobre donald, despues dicen q los medios no manipulan.
aguanten dorfman y mattelart

Anónimo dijo...

Hay que tener en cuenta en contexto en el cual escribieron su libro Dorfman y Mattelart (década del 70), porque se trataba de analizar la manera en que los medios (vistos años atrás como simple mensaje, a la manera de Mc Luhan)podían manipular al usuario sin que éste tuviera la oportunidad de otorgar otro significado a lo que estaba mirando. Por supuesto, los que miran los dibujitos animados de Disney son los niños , y creo que es una manera de educarlos para aprehender el papel que estaba jugando USA en ese momento: después de la depresión del 30 la guerra les vino como anillo al dedo para aumentar la productividad. Por supuesto que el guionista no es ingenuo, pero creo que Dorfman y Mattelart exageraron al justificar la maquinaria Disney como promotora del subdesarrollo. Me calza justo que haya sido la mejor manera de explicar el desarrollo propio de USA en ese momento. Y, como siempre, los nazis fueron elegidos los malos de la película.
Me reí mucho tanto con el libro como con los videos, creo que se pueden disfrutar los dos. Después habrá que ver el proceso histórico político por el cual se llegó a ambos.

Anónimo dijo...

Sobre Carolina:

"contexto en el cual escribieron su libro Dorfman y Mattelart (década del 70), porque se trataba de analizar la manera en que los medios (vistos años atrás como simple mensaje, a la manera de Mc Luhan)podían manipular al usuario sin que éste tuviera la oportunidad de otorgar otro significado a lo que estaba mirando(...)creo que Dorfman y Mattelart exageraron al justificar la maquinaria Disney como promotora del subdesarrollo. Me calza justo que haya sido la mejor manera de explicar el desarrollo propio de USA en ese momento."

Carolina, me parece, de acuerdo a tus palabras, por más que Estados Unidos tratara de expliocar el desarrollo de su país no implica que los demás países no fueran subdesarrollados. De hecho, el modelo capitalista voraz de la década del 70 funciona de esta forma polarizada, entre los países centrales y periféricos.

Y no es para nada exagerado lo que dicen los autores.

Mirá, acá asesinaron a más de 30.000 personas conjuntamente con el resto de gente que se asesinó en las demás dictaduras latinoamericanas respaldadas por el plan Condor. Así que me parece que más que un sutil adoctrinamiento ideológico podemos hablar de un aparato represor completamente cohercitivo en todos sus aspectos. Uno de ellos es precisamente en la ideología.

Negar la existencia de un modelo doctrinario para países subdesarrollados es, en palabras de Althusser, estar tan por dentro de la esfera ideológica que el sujeto no se da cuenta.

Anónimo dijo...

Bueno! Lamento no poder comentar nada productivo. Tampoco logré ver los videos por medio de los links. La empresa donde trabajo me bloquea ese tipo de páginas y la compu de mi casa es lo más parecido a una atari que vi... Si, ya sé, podría verlo en un locutorio pero a las 23 de la noche cuando salgo de la facu, muchas ganas no me dan! Perdón!
Sepan que lo intenté!
Saludos

Anónimo dijo...

Es loco ver como a través de algo aparentemente inofensivo, "transparente" y sano como un dibujo animado se baja línea de una manera tan clara de algo taboo como el nazismo.
Ahora ¿qué influencia tendrían esos dibujos en un chico de 5, 8 o 10 años que los veía? ¿Realmente entendería a que apuntaba el dibujo? ¿A qué público ,esfecificamente, apuntan estos dibujos?
¿La decisión de emitirlos surgiría del mismo Walt Disney o de "alguien más arriba"?

Anónimo dijo...

Bueno, después de lo que hablamos ayer, del motivo que pudo haber llevado a Walt Disney a realizar este dibujo, encontré esto en la net: "En 1943, cuando el gobierno Norteamericano se sintió asfixiado porque la crisis le impedía recaudar más dinero para enfrentar la guerra, alguien propuso hacer una propaganda con el Pato Donald. Tres semanas después el siempre solícito Walt Disney estrenó Der Fuehrer¨s Face, una historia donde se veía a Donald como un sufrido obrero de Nazilandia.
Disney reflejó tan bien el drama del pato, que la gente no tuvo ningún problema para pagar más impuestos"
Y si esto realmente es así, es contradictorio... como decía ayer en clase. Porque por un lado están mostrando la presión y sumición del régimen totalitario pero por otro lado, no dejan de mostrar tambien lo monumental del mismo... y las imágenes que utiliza no dejan de ser propagandísticas.

Anónimo dijo...

¡Fabio Zerpa tiene razón!

Anónimo dijo...

Corrijo, definitivamente los espectadores de cartoons en la década del 40 eran adultos: es más, los cortometrajes se pasaban en el cine antes de las películas.
Transcribo de El Gran Libro del Siglo (es lo que tenía en mi casa):
"En 1941 el negocio del espectáculo norteamericano empezó a ponerse al servicio de los aliados (...) Casi treinta mil personas del mundo del cine sirvieron en las fuerzas armadas, incluidas estrellas como Clark Gable y Jimmy Stewart. Otros, como Groucho Marx, James Cagney y Judy Garland vendieron bonos de guerra. Bette Davis y John Garfield contribuyeron a la apertura de la Cantina de Hollywood, una meca para los militares. Los directores John Huston, John Ford y William Wyler realizaron documentales comprometidos; Frank Capra, Walt Disney y Ronald Reagan, el principal actor de las llamadas "películas de clase B", hicieron filmes de propaganda..."

Anónimo dijo...

Muy buen post Carolina! Hace rato que no miraba acá.

En cuanto a venta de bonos de guerra, no te podés dar una idea de la cantidad de comics que se dedicaban a propagandear (y los que surgieron para tal fin, otros tantos).

Te aconsejo visitar www.superdickery.com en la parte de propaganda.