viernes, septiembre 29, 2006

Believe it or not...

Sí, ya sé que hoy me había comprometido a postear sobre otros temas, acaso más importantes. Pero es así, a veces la realidad atenta contra nuestras mejores intenciones, y entonces me levanto, enciendo la computadora con otros propósitos, pero antes me detengo a leer...

Y leo. Y tiene tanto que ver con lo que charlábamos ayer en el práctico, que decido dar un golpe de timón (la frase me suena como si alguna vez hubiese yo tenido un bote, cosa que jamás, pero ya está escrita y allí la dejo...)

Comencemos por el principio. Un cuentito, una ficción, como para comenzar el día de un modo divertido. Y de nuevo es una lectura que tiene su origen en Orsai. Haga click aquí.


Ahora bien (presumo que ya han leído el texto en cuestión; si no lo han hecho por favor léanlo antes de seguir adelante), por si alguien no lo notó, en el texto hay un par de vínculos. Si no los siguieron antes, pueden hacerlo ahora a través del link que les ofrezco un par de líneas más abajo. Digamos antes que el diario El País de España es un medio importante. Pero además la noticia se reproduce en tantos otros medios de comunicación, según podrá constatarse yendo al Google y anotando "Jack Neal" + ebay en el buscador (75.000 resultados), que queda claro que éste es sólo el proverbial botón de muestra. Les propongo, entonces, leer la noticia.

¿Ficción?... ¿Realidad?... Personalmente me resulta verosímil el texto escrito por Hernán Casciari. Por supuesto, nada cambirá con que esta noticia sea cierta o no. Pero como dije antes, es sólo un botón de muestra.

24 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece que lo que importa no es si la noticia es verdadera o falsa, sino la velocidad con la que las noticias y las cosas circulan por el mundo. Además funcionan como una especie de telefono descompuesto, en donde cada uno va agregando o cambiando una parte de la historia a gusto y piaccere. Nunca sabremos si lo que ocurrió en un pueblito en Asia a más de 10000km de distancia es verdadero o falso, pero lo compramos igual, nos compramos ese buzón. Pero ahí está el peligro, como hablaban ayer en la clase con respecto a Wikipedia, el peligro de creer que todo lo que circula por internet o todo lo que los medios nos cuentan es verdad. Tal vez sea un poco esceptica, pero creo que hay que abrir más que nunca los ojos y estar alerta con respecto a lo que las nuevas tecnologías nos pueden brindar. Estoy a favor del avance tecnológico, pero a qué precio?

Anónimo dijo...

"No importa la verdad, sino la belleza", dice alguien que conozco. Y yo suelo decir que lo que importa no es la verdad, sino la verosimilitud, aunque ejemplos como éste me dejan pensando.

No me preocupa (tanto) el pueblito a 10000 km, sino el hecho de que lo mismo vale para el vecino que vive a la vuelta de mi casa.

Y por último te diré, respecto de tu autoacusación de "escéptica", que siempre recuerdo al maestro Ferrer cuando decía que él no era apocalíptico, sino realista.

Anónimo dijo...

Yo creo que el tema de las noticias es bastante complicado, pero que no necesariamente tiene que ver con el avance de los medios como nuevas tecnologías de información; aunque es cierto que los infinitos desarrollos de internet sirvieron, entre otras cosas, para que nos demos cuenta de que cualquiera puede hacer circular cualquier cosa y, esperemos, hayan ayudado a abrir los ojos a muchos. Definitivamente sí es importante que la noticia sea verdadera o falsa ya que, si bien no nos influye demasiado que un niño de tres años haya comprado un auto por internet, sí les cambió la vida a muchos de los que creyeron que las invasiones extraterrestres de las que hablaba Orson Welles en la radio eran ciertas (aunque hubiera advertido, no lo suficiente, que se trataba de una ficción). Salvando las distancias (y los avances tecnológicos), creo que hay una parte importante de la responsabilidad que depende de los encargados de "transmitir la información", pero, en lo que respecta a nosotros -adhiriendo al comentario de m. turner-, es necesario que no creamos todo lo que dicen los medios y que estemos un poco más despiertos. Y sí, también coincido, no es ser escéptico ni apocalíptico, sino realista.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con lo que dice el docente respecto a la verosimilitud, esto es lo único que importa a la hora de decidir hacer publica una información. Más allá de saber si es verdadera o no, lo importante es que quien cumpla el rol de "receptor" pueda sentirla como verdadera. De todas formas, no considero que seamos tan ingenuos sino que entramos en el juego que nos proponen y tratamos de leer lo más entrelineas posible.

Anónimo dijo...

Hay dos cosas que me dieron un poco de gracia y no queria dejarlas pasar...
A Luciana: es como dice Majul: "no creas en todo lo que dicen los medios, y menos en este programa, el espiritu critico te va a salvar...jaja" No hay que estar buscando creer la verdad o no de lo que dicen.....
A Silvana: ¿Como se "siente" una noticia como verdadera?.

Sin ofender.

Anónimo dijo...

La noticia debe ser verosimil para que te la creas y si te la crees es justamente porque la considerás factible y también verdadera, a esto me refería con el termino "sentir".
Espero responder a tu pregunta anónimo...

Anónimo dijo...

Profesor lo molesto por que necesitaria saber que lectura esta programada para esta semana ya que no pude asistir la clase pasada. GRACIAS!

Anónimo dijo...

En el texto de Orsai hay una frase que dice “A los idiotas de la prensa no les importa que algo sea verdad, pero necesitan que sea posible. Vivimos de eso”.
Lamentablemente, creo que esta afirmación puede aplicarse no solo al campo periodístico. Es fácil comprobarlo en nuestra vida cotidiana. ¿Cuántas veces se dicen cosas no del todo ciertas pero que a uno le queda la duda porque son posibles, realizables, viables?
A mi también me resulta verosímil el texto de Hernán Casciari, pero la duda va a estar siempre o no? Son, a mi entender, peligrosos los límites que se manejan hoy día en cuanto a herramientas informáticas refiere. Con la aparición de Internet se nos da la posibilidad de decir, escribir o leer cualquier cosa, que vaya uno a saber de donde proviene, quién lo escribió, de qué fuente sacó la información. Es un gran “efecto dominó”, donde alguien escribe algo, otro se hace eco y la cadena sigue ad infinitum y hasta que llega el momento donde se desconoce el verdadero origen de la cuestión.
Entonces cabe plantearse hasta que punto los avances de la tecnología son beneficiosos si nos van a llevar a vivir en mundo plagado de mentiras o noticias falsas.

Anónimo dijo...

Farfalla: Dicen que hay que leer "Forma, sustancia y diferencia", un texto de Gregory Bateson. Pero no está claro si esto es verdad, o si es sólo un rumor que circula entre quienes preguntaron qué texto había que leer sin haber comentado nada en el post del blog...

Anónimo dijo...

Coincido con aquellos que dijeron que lo que realmente importa para que una información sea publicada es que sea verosímil, que sea creíble (quizá tenga que ver con la necesidad de abastecer a los medios de manera rápida y continua). Para mí, el problema radica en el hecho de que seamos capaces de poder discernir qué es verdadero y qué no. Pienso que no es tan simple como saber leer entre líneas o tener en cuenta en qué medio se difunde, etc., difícilmente podamos comprobar noticias como la del niño que compró el auto, y si bien es un hecho que quizá no sea tan importante, es una muestra de nuestra incapacidad para saber si algo que los medios dicen que sucedió realmente aconteció. Sin embargo, si la tecnología que hace posible esto no existiera, pienso que tampoco podría garantizarse la verdad de la información.

Anónimo dijo...

En primer lugar creo que el post deja la puerta abierta a distintos caminos de argumentaciones posibles, según el punto de vista que se adopte. Lo primero que pienso es en la cuestión de la fuente de la información. Es decir, de donde sale la noticia. Porque se me ocurre esto? Supongo debido a la cuestión de que no es lo mismo una noticia publicada en el diario El País, que una información dada por un particular. Tiene que ver con los “prestigios” y los criterios de verosimilitud que maneja cada uno, apoyados por los consensos. Será entonces más verosímil la información difundida por el periódico, esto aumentado por la cuestión de que suponemos que en los diarios no se publican mentiras sino que existe el chequeo de la noticia a priori.
Por otro lado, es cierto que no importa realmente si es verdad que un nene compro un auto, sino como dicha información circula por la red, e incluso la trasciende. Me viene al caso una película llamada “rumores” en la cual una información falsa es puesta a disposición de los personajes quienes no saben de la falsedad del rumor, pero que comienzan a disiparlo y poco a poco comienza a ser cada vez mas creíble. (perdón por arruinar la película al que no la vio, y perdón por la descripción pobre del argumento de la misma). Todo esto me lleva a pensar, por un lado, que dado la velocidad de circulación de la información, hoy día se publica cualquier cosa que resulte verosímil, dado que además hay consumidores para dichas noticias. Al Papa Juan Pablo II lo mataron varias veces antes de que realmente falleciera. Y por otro lado, creo que se han trastocado los límites e incumbencias de los géneros. Digo, el género informativo hoy también debe entretener. Las noticias ya no se cuentan como un mero acontecimiento, hay opiniones, bromas. Muchas notas periodísticas de los noticieros parecen presentarse como una película de suspenso (sobre todo aquellas referidas a conflictos bélicos). Me fui por las ramas???

el docente dijo...
"No importa la verdad, sino la belleza", dice alguien que conozco.

Quien lo dijo? Ya se, el bambino Veira. Sería creible, no???

Anónimo dijo...

Una pregunta para el docente ¿hay que hacer algo para el Jueves? queria saber porque la semana pasada no pude ir a clase:

Anónimo dijo...

Abro un parentesis. Se rumorea por los pasillos de la facu que el jueves hay paro, ¿la catedra adhiere?.

Anónimo dijo...

Cuántas preguntas, Usuario Anónimo...

Antes le contesto a Lucas: más allá del chiste, la frase alude al arte. ¿Cuál es la verdad en el arte? Pues bien, no hay ninguna. Entonces, alcanza con mover ligeramente el tablero de juego, cambiando un ápice de razón por estética, para que la frase en cuestión sea absolutamente cierta. "¿Y si comenzamos a convalidar nuestras verdades con otros parámetros?", sería la propuesta.

Ahora, fijate en esta frase, que es prácticamente lo mismo, pero dicho con otras palabras: "Si non e vero e ben trovato" (Si no es verdad, está bien inventado...). Ahí estamos, en el límite de la construcción del mundo. Con esto tiene que ver el próximo ejercicio, que estoy posteando en un par de minutos, como respuesta aparte a la primera de las preguntas del Usuario Anónimo.

Como respuesta a la segunda: Sí hay clases. Si es necesario la damos en la plaza.

Anónimo dijo...

"Cada cual cree en lo que quiere creer". De nuevo, me parece una consideración simplista. Somos en virtud de la realidad que creamos (y/o creemos). Y actuamos en consecuencia. Vale decir que a una interpretación errónea, nuestra adaptación al medio será también errónea. Con las consecuencias derivadas de cada caso en particular. Además, y fundamentalmente, la cuestión no tiene que ver con un acto volitivo, y ni siquiera consciente. Con lo cual nuestras respuestas tampoco lo son. Vamos a seguir trabajando con todo esto, por supuesto. A esos efectos son estas propuestas y otras que vendrán.

Anónimo dijo...

Una vez un profesor de Taller I me dijo: "si queres escribir o decir algo convincente, no necesariamente tiene que ser verdadero, sino verosímil".
Desde ahí me quede pensando si algún día sufría algo "verdaderamente" imposible de creer camino al laburo (pero que es verdadero)¿Qué hago para no perder el presentismo, le invento algo verosímil o le cuento la verdad, imposible de ceer?

Anónimo dijo...

Profe: Interpreto que mañana jueves 05/10 tenemos clases, más allá del paro anunciado. Además se entregan las consignas para el parcial.
La clase pasada no asistí por razones de salud pero estuve leyendo los mensajes.
Por favor, indíqueme si me equivoco.
Saludos, Roxana.

Anónimo dijo...

Rox, reitero que sí, que vamos a tener clases.

Anónimo dijo...

Nos vemos entonces. Perdón por la insistencia...
Roxana

Anónimo dijo...

Me pareció muy simpático el cuento. No me parece que haya nada diferente que se pueda aportar. Los medios son todos lamentables. De hecho, hace bastante tiempo que elegí estar completamente desfinformado de todo lo que no me interesa.

El cuento me hizo acordar a una de las últimas películas de James Bond, no sé si era Golden Eye, donde había un tipo que era el dueño de un grupo multimediático que se engargaba él de generar las noticias. Por ejemplo, en una parte asesina a toda la tripulación de un submarino para polemizar y generar esas noticias. Es decir, el tipo no mentía, generaba una realidad nueva.

Es parecido al cuentito de ebay, pero un poco más apocalíptico. A veces me temo que somos víctimas de ese tipo de manipulación, y no de inocentes mentiras.

Anónimo dijo...

Qué manera de tapar con pavadas sin sentido los espacios destinados a la comunicación... pero parece que eso nos gusta... porque lo compramos

Anónimo dijo...

A ver, M.Rohatsch, explíquese mejor. ¿Cuáles son las pavadas? ¿Las propuestas desde el blog? ¿Los comentarios realizados a dichas propuestas? ¿Las noticias de ebay reproducidas en los medios?... Nosentendió.

Anónimo dijo...

¡Perdón perdón! (dos veces) por no haber contestado antes. No digo que las pavadas sean las consignas ni los comentarios, sino las noticias de e-bay, y no solo de ellos. Digo, ¿¿acaso la agenda de los medios de comunicación no se llena con temas casi irrelevante todas las semanas??, ¿no están los medios (y sobre todo los noticieros) de lo más amarillistas?... Espreo que ahora se haya entendido algo más...
Y perdón si provoqué (¿cómo se escribe?) algún principio de furia en alguien

Anónimo dijo...

Vero: Te equivocás mal cuando suponés que por tratarse de una noticia superflua no le hace mal a nadie ni afecta a nadie. Lo que hace esta noticia, al igual que su conjunto de noticias hermanas, superfluas, aparentemente nadas en la inmensidad del volumen de la información, es lo que el agua le hace a la roca: contribuye a degradar el sentido de lo verdadero y lo falso dentro de ese universo de comunicaciones, degrada, junto con todas sus similares, la noción de lo real. Es como las langostas: una es inofensiva. Pero el problema es que vienen de a cientos de miles.