viernes, abril 13, 2018

2. Acerca del pensamiento zen

Hay una idea que propone Daniel Lutzky que acaso les guste. A mí me gusta, al menos. Dice que si adherimos a una ideología, a una religión, a una doctrina política, a cualquier colectivo, es por una cuestión estética, antes que racional. Lo cierto es que para acercarse al pensamiento propio de la filosofía zen es necesario adaptarse a una estética muy diferente de la occidental, a la cual estamos acostumbrados. Por eso les dejamos aquí un par de fragmentos del film "Sueños", de Akira Kurosawa, con la intención de ilustrar un poco la cuestión. El primer fragmento se titula "El jardín de los durazneros" y dice mucho, desde lo narrativo y lo simbólico, pero también desde la estética, acerca de cómo se piensa en oriente. Porque, en efecto, la estética funciona a la manera de un espejo en cuyo reflejo una mirada atenta puede descubrir mucho.

Comentario de rigor: el primer video no tiene subtítulos ni está doblado. Suponemos que la mayoría de ustedes domina el idioma japonés, pero por si acaso alguno no se sintiera cómodo con esta generalización, he aquí una reseña de lo que sucede: al comienzo el niño lleva unos tentempié a su hermana, que está reunida con unas amigas, pero al parecer ha contado mal y le sobra una porción. El pequeño está seguro de haber contado a una niña más, y protesta. Después ve a esta misteriosa niña de nuevo, decide seguirla, y así llega hasta donde otrora estaba el jardín de los durazneros. En este lugar se pondrá a llorar, porque los espíritus de los durazneros lo acusan de haber contribuido a la feroz tala que han padecido. Sin embargo, uno de ellos lo defiende: dice que el niño ha sido el único que intentó salvar a los árboles cuando sus padres mandaron cortarlos. Entonces le regalan una última danza: la danza de los durazneros en flor. Noten cómo el contenido esencial del corto está concentrado en su estética, (del orden de lo sensible) más que en lo narrativo (que sería un orden más intelectual).

En cuanto a los otros dos videos, les rogamos sepan disculpar el horroroso e imperdonable doblaje al español, pero es lo que encontramos.

Los textos que hay que leer para la próxima clase:
- Eugene Herrigel: El zen en el arte del tiro con arco. (Puntos 2 y 6)
- Toshihiko Itzutsu: El koan zen (no lo tenemos digitalizado, pero si querés bajarte algo sobre el tema, este libro del mismo autor es una muy buena opción).








9 comentarios:

Dana dijo...

Me quedo con una frase del último video que me dejó pensando, "La gente siente debilidad por las cosas cómodas". Creo que este fragmento tiene relación directa con el texto de Herrigel. Las personas solemos optar por lo cómodo, por lo que está dado, por lo establecido. Porque aceptar es más fácil que cuestionar.
Creo que tanto la película como el texto hablan de que es necesario salir de la zona de confort, moverse, explorar a través de los sentidos y las percepciones. Al fin y al cabo se trata de dar el mejor tiro aunque no sea en el blanco. Se trata de esquivar los atajos, de encontrarse con uno mismo, de conectarse (y desconectarse).


La película más allá de su mensaje verbal, habla con las imágenes, con la música, con las vestimentas. Hombre/Mujer y naturaleza son parte de lo mismo. La muerte se celebra. El arcoiris marca el camino. Lo valioso es vivir, y el tiempo significa mejorar, no correr.

Germán A. Serain dijo...

Dana, por haber sido la primera que escribe un comentario en el blog te has ganado un alfajor Cachafaz. Melisa será la responsable de hacerte entrega del premio.

John dijo...

En el Tercer fragmento de "Este sueño ya lo he vivido", las frases del viejo aldeano, en su dialogo con el viajero, se pueden relacionar con el Zen en el arte del tiro con arco de Eugen Herrigel. Una de esas frases fue la expresión del significado de la naturaleza contraponiendolo con las visiones cientificistas y también tecnicistas del mundo, al afirmar que los seres formamos parte de la naturaleza. En Herrigel, una de las eneseñanzas de su maestro Zen que le dio para entender el pensamiento Zen fue "No olvide que, aun en la naturaleza, existen coincidencias incomprensibles y, no obstante, tan ciertas que nos acostumbramos a ellas como si se sobreentendieran. Le daré un ejemplo que me ha ocupado muchas veces: la araña "danza" su red sin saber nada de la existencia de moscas que quedarán atrapadas en ella. La mosca, danzando despreocupadamente en un rayo de sol, se enreda sin saber lo que le espera". De esto se puede substraer a que uno de los modos mencionados para sostener la aldea es el estiércol de vaca que sirve como combustible. Quizás para mucho de nosotros, es algo irrelevante y desechable. Para otros es importante.

Otro hecho del fragmento para destacar es que el viejo anciano asiste al funeral de una mujer amada por él en el pasado. El anciano está desprendido de ese fluctuar entre el placer y desplacer, un estado de animo que vive sin rencores...

Rocío dijo...

Antes de ponerme a leer y a ver los fragmentos de Kurosawa lo primero que me llamó la atención fue la distinción en el post entre estética y racionalidad. Hay un poema muy breve de Roberto Santoro que dice que "la estética ética est", con lo que acuerdo mucho: la estética podría no ser otra cosa más que la construcción acorde a los fines de una ética, que es racional en principio aunque después se naturalice y automatice.
En segundo lugar algo que me llamó la atención, sobre todo del texto de Herrigel, fue la ausencia de la otredad en la autopercepción y en la conexión con el universo-yo. Como si el yo fuera una cuestión de escencia, y por ende de des-historia si se quiere. Y me puse a pensar en lo que charlamos en la primera clase en el aula, sobre cómo la construcción de unx mismx implica a unx otrx. Lo más probable es que desde mi occidentalidad no haya podido entender muy bien la cuestión.

Germán A. Serain dijo...

Gracias por el aporte, John.

Rocío, me gusta pensar en una estética que es al mismo tiempo una ética. (Me pregunto si la ética nace en la racionalidad o en la afectividad.) Y en cuanto a Herrigel, de la otredad (o de su borramiento) se trata, en definitiva. Pero ojo, que hay dos formas de borramiento: una cuestión es negar al otro y otra verlo como algo integrado a uno mismo. (By the way, fijate por favor que se te traba la equis en tu teclado.)

Unknown dijo...

Me llamó mucho la atención que el zen parte de la distinción exterior/interior y después "desconcierta a los principiantes afirmando categóricamente que, en realidad, no existe ninguna diferencia de ese tipo" y me puse a buscar ejemplos. Llegué a una tesis que relaciona uno de mis libros favoritos, 9 Stories de J.D Salinger, que me parece que enriquece mucho la lectura y que ayuda al entendimiento de lo que es el camino para llegar al "satori".
Lo que plantea la tesis es que los cuentos de Salinger son koanes a partir de los cuales el autor intentó "entrenar" a sus elctores occidentales para acceder al satori, a la iluminación. Una de sus ideas de base es que los cuentos de Salinger siempre tratan de situaciones mundanas que terminan abruptamente y dejan al lector lleno de dudas, eso es "la única herramienta que le entrega al lector para descifrar la historia que acaba de leer" (p49) y el autor de la tesis lo asemeja con la respuesta del maestro zen frente a las preguntas de su aprendiz, a partir de la cual el aprendiz debe anular ese "pseudo problema" y llegar así a la experiencia zen.
Dejo el link de la tesis: https://repository.javeriana.edu.co/bitstream/handle/10554/15951/HerreraErasoDaniel2014.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Unknown dijo...

En esta aldea no tenemos templos, ni sacerdotes [...] Los aldeanos conducen al fallecido"; " Cuando mueren se los felicita por el trabajo realizado"; "Las cosas más importantes, son el aire puro y el agua. Los árboles y las plantas, proporcionan ambas cosas y la gente las contamina [..] contaminan la mente de los seres humanos”.

Me pareció importante resaltar estas tres citas, correspondientes al tercer video, ya que creo que coinciden de alguna forma con la idea que propone Lutzky. En la charla que tienen los dos hombres se puede observar las posturas contrapuestas entre el Oriente y Occidente.
Es decir, desde una filosofía de vida propia, el anciano "critica" las elecciones como la religión o la ideología occidental, hace alusión a la idolatría de las personas hacía los científicos, que al fin y a cabo arruinan a la naturaleza. Nos permite acercarnos a la filosofía zen, a través de otra estética elegida. Pero… ¿Se trata solo de estética? ¿No hay cuestiones racionales en la elección de una mejor calidad de vida?
Por otra parte, y en búsqueda de comprender un poco más, investigue sobre la película. Adjunto acá un link en el que la explicación me parece interesante de leer. http://www.raco.cat/index.php/FilmhistoriaOnline/article/viewFile/244342/327359
En el que se explica que los sueños de Kurosawa se divide en ocho episodios, los cuales evocan relatos oníricos del propio autor y poseen una constante de fondo: la Muerte.
Por último, me gustó un concepto que trata Herrigel: “El zen es la conciencia cotidiana. […] El hombre es un ser pensante, pero sus grandes obras las realiza cuando no calcula ni piensa”

Sofia Selasco dijo...

Debo admitir (y espero no ser la única en la comisión) que me costo mucho adentrarme en la filosofía Zen y entender concretamente la distinción entre interior y exterior.

Me llamó la atención la afirmación respecto a que oponer interior y exterior resulta ridículo por su intima relación, ya que durante gran parte del texto se busca caracterizarlos por separado. El hecho de que, como afirma el autor, ninguna de estas categorías sean comportamientos estancos, puede ayudarnos a pensar de que forma el hombre va evolucionando a lo largo de su vida. La forma de pensar, gustos y preferencias irán cambiando a medida que el hombre vaya teniendo contacto con nuevos estímulos.
Creo que la dificultad a la que se hace referencia cuando se dice que la filosofía oriental es difícil de aprehender, tiene que ver con que el hombre debe hacer un esfuerzo por romper con determinados postulados en los que se encuentra "cómodamente" asentado (y acá concuerdo con la compañera Dana que mencionó las zonas de confort). Esta noción de comodidad se puede relacionar con el texto de Herrigel en donde el alumno busca que su maestro reconozca su avance en la clase, sin embargo este último no lo hace y en cambio le exige más practica.

Mariano Muldowney dijo...

Me llamó la atención la frase presente hacia el final del texto de Herringel. 'Tiene que desprenderse de ese flucutuar entre placer y displacer'. En el teórico del lunes comenzamos a ver Freud y una de las cosas que remarcó la profe fue la constante búsqueda de placer y de completarnos que tenemos, como motor de vida. Quienes practican al filosofía zen pudieron desprenderse de esa vana búsqueda o efectivamente encontraron lo que buscaban?