lunes, abril 26, 2010

¿Cómo definirías un mapa?


¿Cómo definirías un mapa? Probablemente como una representación, claro. Pero, ¿qué cosas son las que representa en definitiva el mapa? ¿Quién lo representa y desde dónde? ¿Quién lo interpreta? Un mapa nunca es inocente, incluso cuando muchas veces lo construyamos desde nuestra ingenuidad.

Asomate, por ejemplo, al Mapa de Peters. A simple vista pudiera parecer que el mapa está mal dibujado o deformado, pero lo cierto es que es un mapa tanto o más real que cualquier otro de los que estamos acostumbrados a ver. Hay algo de información disponible en el enlace. ¿Y qué pasa con este mapa, puesto "patas para arriba"?

Pero no se trata nada más que de cartografías. Y no es gratuito que, en la otra punta de estos temas que estamos tratando, estemos hablando del amor. Mirá, te dejo un cuentito de Hernán Casciari como para que intentes entender a qué me refiero...

Los gemelos Andreizek eran dos polacos gordos, de cuarenta y cuatro años, que estaban peleados desde hacía una década. Uno de los hermanos vivía en Varsov, el otro en Wroclaw. Los dos solteros, los dos solitarios y obesos. El destino quiso que se encontraran en el chat de Terra Polska con identidades falsas. Uno de los gordos se hacía pasar por una jovencita virgen. El otro fingía ser una lesbiana morena y tímida. Con el tiempo y la charla nocturna, ambos se enamoraron del personaje del otro, creyéndolo real. Se enviaban mensajes de móvil, se pajeaban pensando en las muchachas, se mandaban regalitos. Un día decidieron verse en un hotel. Cada uno tenía planeado decirle a su pareja la verdad. Cada uno tenía la esperanza de que la otra lo aceptase. Y lo más sorprendente: ambos habían decidido invitar al hermano a la boda, si la historia de amor funcionaba.

Decime la verdad: ¿a vos nunca te pasó nada parecido? No, no digo que te hayan engañado, o que hayas querido engañar... Hablo de que te hayas engañado vos mismo/a, creyendo que algo que no era más que un mapa fuese algo real. Contanos...

30 comentarios:

Benjamín dijo...

Que yo recuerdo, me pasó una vez cuando tenía 17 años. Fue con una chica con la que tenía buena onda y compartíamos todo el día todos los días. Creo que estaba enamorado ya que nunca había sentido algo así y se lo dije. La historia no tuvo un final feliz porque creo que confundí amor con amistad, o amistad con amor. Despues de allí nunca más compartimos nada. De cualquier forma creo que es algo normal. A mucha gente le ha pasado lo mismo, ¿no?

Germán A. Serain dijo...

No tenés idea de hasta qué punto tu historia se repite. En lo personal, tengo incluso prohibido hablar del tema... Pero te pregunto: ¿por qué decís que fuiste vos el que se confundió, y no ella? Por lo demás, presumo que lo más molesto para vos ha de ser la cuestión evidenciada por el "creo".

Roberta dijo...

Siempre!!!! Las representaciones que nos hacemos de las cosas, hasta de nosotros mismos, terminan por parecernos la única y pura realidad. Quizá eso no sea un engaño con todas lasletras o intencionado, pero es un engaño al fin.
Kremer dibujó un mapa, y esa representación del lugar en el que vivimos fue aceptada. Peters dibujó otro mapa, y se desataron las discusiones. Cada uno tenía evidentemente una posición, una idea de como debían ser las cosas (que volcaban en lo que parecería el simple dibujo de un planisferio)
Lo que me parece lo más importante de esto no es el hecho de en cuál mapa estaría bien creer y cuál habría que descartar, ni si quiera si deberíamos inventar uno nuevo, lo que destaco es que cada uno de los que idean una representación tienen que creer en ella, "engañarse", para después transmitirla o darla a conocer.
Como los hermanos separados, que se formaron una representación de lo que serían sus amores, y sus futuras vidas luego del supuesto entendimiento por parte de sus personas engañadas. Ellos creían en eso.
"Los engañé a todos engañandome a mí." ¿Quizá a eso se reduce nuestro transcurrir?

Maxi Heath dijo...

Roberta, no estoy muy de acuerdo con lo que dijiste de que "cada uno de los que idean una representación tienen que creer en ella, 'engañarse', para después transmitirla o darla a conocer", puntualmente con la palabra engañarse. ¿Por qué es un engaño? Creo que es una cuestión de creer y nada más. De ahí que la representación ideada concuerde con el hecho mismo es otra cosa. Digo, si yo creo que soy uno de los mejores jugadores de fútbol del mundo, bueno, podría decirse que me estoy engañando a mi mismo -y de repente hasta me pongo a dudar si aún ahí la palabra 'engaño' me convence-. Sin embargo, si Lionel Messi cuando se va a dormir se pone a pensar que quizás es uno de los mejores jugadores del mundo, ¿por qué decir que se está engañando? A lo sumo está creyendo -en este caso creo que con motivos bastante sólidos- en algo nomás.
Salutti!

Germán A. Serain dijo...

Maxi, no le pegues a Roberta, que el que arrancó a utilizar la palabra "engaño" fui yo. Pero "engaño" no se refiere aquí a mentira. O por lo menos no solamente a eso. Engaño es cualquier clase de representación, desde el momento en que se pretende que ella, la representación, ocupe el lugar de lo que es representado. Tiene mucho que ver con lo visto en cuanto al zen, si vamos al caso.

Roberta dijo...

Si, es que tenés razón Maxi pero todo depende qué entiendas por engaño, por eso puse la palabra engañarse entre comillas. Es un creer, pero muchas veces creer en algo no es lo mismo que saber la verdad, describir la realidad. Yo me refería a cuando uno representa algo y esa representación es el hecho en sí mismo y a la vez nunca es la verdad absoluta (como en los ejemplos de los mapas). Para llevarlo a un extremo: Messi puede pensar eso que vos decís, pero nunca va a saber a ciencia cierta si en un potrero en el Congo Belga hay veinte pibes que juegan mejor que el. No sabemos si lo que creemos a ciencia cierta no es un engaño. Y con lo que me decías me puse a pensar en otra cosa también: engañarse quizá también puede ser equivocarse.

Roberta dijo...

Ajajaja no había visto tu comentario Germán, no me estaba pegando pobre (eso creo ajajaj), es un debate (?). Y justo acabo de escribir algo parecido a lo que vos dijiste, hay muchas cosas que puede significar el engaño y una representación es una de ellas. Yo lo entendía así, por eso mi comentario.

Maxi Heath dijo...

Nooo, no era mi intención 'pegarte' Roberta, por favor no creas eso. Nada personal eh, jajaja. No, entiendo lo que decís y lo comparto, solo que la palabra engañar no me gustaba en ese caso. Quizás tendría que haberle prestado más atención a las comillas -aunque probablemente hubiera saltado igual, je-. Está buena la relación que hacés entre engañarse y equivocarse, creo que por ahí vino lo que estaba objetándote. Igual, pensándolo un poco más, de repente se me ocurrió una situación: un hombre que le está metiendo los cuernos digamos de una manera 'descarada' a su mujer, o sea, sin disimularlo. Si esa mujer -u hombre, pongamos el caso que queramos- no se 'da cuenta' que la están engañando, de repente, sí, me encuentro diciendo que esa mujer se está engañando si se afirma que su pareja le es fiel. Ahora, llendo al ejemplo de que, de repente, alguien cree que su compañera de la facultad le está tirando onda, pero, de hecho, solo estaba siendo 'buena onda', de repente me encuentro diciendo que, bueno, se 'equivoco'. Ja, parece que distingo engañarse y equivocarse por el grado de evidencia "inobjetable" en la situación. Llendo al caso Messi, y sí, tenés razón, quizás en el Congo está el mejor jugador del universo, pero nadie lo descubrió todavía.
Abrazo Roberta, Germán. Samba.

Roberta dijo...

Ehhh aca volví ajaja. No lo tomé a mal para nada, al contrario.
Es que es verdad que engañarse suena fuerte, pero claro, por eso las comillas y el bla bla jaja.
Puede ser que todo tenga que ver con el grado de evidencia de la situación eh. Probablemente en el caso de la muchacha de la facultad "tira onda" sería algo común con lo que solemos confundirnos, equivocarnos, y en cambio yo diría que la mujer que sabe que es inobjetablemente engañada es simplemente una boluda jeje (no por ser engañada, si no por finjir que no lo es)
Buena onda este intercambio.
Saludooos :)

Germán A. Serain dijo...

Atento, Maxi, que el comentario fue "buena onda". O sea: a no confundirse.

Lucoso dijo...

Paso a saludar, tan sólo. Y de paso dejo un comentario que surge de lo tratado la clase del jueves pasado:

Occidentales, fáusticos: ¡nos falta que nos falte la falta!

Lucoso dijo...

"Está buenísimo!" es una hermosa expresión que el macrismo nos ha sabido expropiar, o al menos así lo ha intentado en tiempos de campaña. Afortunadamente nos queda todavía otra, cuando se dice de algo que es o está impresionante. Se trata de una ex-presión que im-presiona, que puja hacia adentro, hacia el propio cuerpo. Todo esto para decir que, entonces: es impresionante cuando una idea se posa sobre nosotros, invitándonos a pensar (aunque, en rigor, se trata de algo más que una invitación, es más bien una compulsión que nos obliga a pensar), cuando (como felizmente suele decirse) "nos cae la ficha". Y la ficha cae cuando ella quiere, siempre (como decía Spinoza: no somos dueños de nuestras ideas sino que, por el contrario, son ellas las que nos poseen). Y así como casi una semana después me cayó la ficha de lo visto el jueves pasado, ahora, como derivado del comentario anterior, ficha de ficha, se posa sobre mí una reformulación de la frase aquella (nos falta que nos falte la falta), que a la vez la complementa: ¡la falta es lo que nos sobra!

Lucoso dijo...

Falta envido.

Roberta dijo...

Germán, no quise hacer ese chiste pero se ve que era el destino que fuera dicho (?), menos mal que se te ocurrió ajajajjajaja.

Coincido Lucoso, muy buena la frase. Habría que hacérselo entender a Don Juan, no se si va a dejar la sobra de mujeres tan fácilmente ja!

pd. treinta, son buenas (?)

Stella H. dijo...

Me parece que en lo que se diferencian el engaño y el equivocarse es en que uno no se equivoca a porpòsito, pero si puede intentar engañarse intencionalmente, para no sufrir por ejemplo, como en el caso de la mujer engañada.
En la situaciòn de la compañera que "le tira onda" supuestamente a su par, me parece que el error puede estar causado por cualquiera de los dos actos: puede ser una equivocación (el chico leyó mal los indicios) o un engaño (tiene la necesidad de creer que esa persona está interesada en èl).

Lucoso dijo...

Lo de Don Juan es impresionante: sabe que las mujeres que sobran son las que a otros les faltan.

p.d: Treinta no mienten, son buenas hasta en la derrota.
Me voy al mazo.

Damian dijo...

Me parece que esa especie de enganio de la que hablamos es algo que vivimos generalmente, con muchas cosas, aunque se vuelve mas rotundo y evidente cuando se trata de personas.
Creo que uno de los casos mas tipicos se da con los amigos, o con quienes creemos que eran, son o seran nuestros amigos, ademas de obviamente el que ya se cito con ese hombre/mujer que idealizamos como el de nuestras vidas y termina siendo algo distint.
Con esto quiero traer a nuestras cabezas esas veces que suponiamos que por ser nuestros amigos, ciertos seres se debian a nosotros, se correspondian, eran incondicionales. Y lamentablemente (o no) uno se lleva sorpresas. El momento es duro, porque sin duda que esa otra persona estaba idealizada por nosotros, pero tambien creo que tiene la carga de realidad necesaria para entender que no todos los que creemos son "buenos" (por decirlo resumidamente de alguna manera), y que tampoco hay que serlo para sentirse bien.
Me parece que el encuentro con realidades, la caida de un mapa idealizado por otro real, nos tiene que jugar a favor de cierto modo. Hasta aca llegue, dando vueltas, y creo que me di cuenta de que lo que queria decir era ms simple y conciso: No intentemos ser "buenos" o que los demas lo sean, solo seamos...
Facil decirlo, dificil hacerlo, pero bue...

Julia dijo...

jaja me hicieron reír con sus comentarios.
Creo que el "engaño" (entre comillas, dado que el término entró en discusión) a uno mismo es totalmente inconciente. Uno cree tanto en esa representación que la concibe como real, tanto en el caso de Messi como el de la mujer/hombre engañada/o. Te pueden decir todos los días que tu marido te engaña que lo vas a negar a muerte porque tenés como representación de tu marido alguien que jamás te engañaría(valga la redundancia).
Uno está cegado con lo que cree saber, con lo que cree pensar, con lo que cree tener y la única persona que puede hacer que veas la realidad es uno mismo.
Nunca les pasó tratar de hacerle ver algo a alguien querido y que el otro no vea nada? O mismo a uno, cuando te "cae la ficha" querés esconderte 10 mil metros bajo tierra...no está bueno!

Unknown dijo...

Ai German vos queres que yo termine de deprimirme? jajaja

Creo que uno se vive engañando en un monton de cosas para sufrir lo menos posible para cubrirse por esa cajita de cristal y seguir para adelante sin darse cuenta de muchas cosas que a uno lo harian frenar.

En cuanto al amor, se complica, uno se cree una situacion que quiza nunca va a pasar o sueña con algo que nunca va a llegar pero sin embargo sigue tratando y trata, trata, trata hasta que se choca con la "realidad", se le rompe esa cajita de crsital y ahi te quiero ver.
Porque seamos sinceros, este tipo de engaños es para desamores o amores no correspondidos por decirlo de alguna manera, porque cuando uno esta feliz en pareja ¿que hay que engañarse? si uno esta barbaro, se encuntra muy facilmente en el mapa y no tiene la necesidad de darlo vuelta para poder hallarse en algun lado.
El tema es cuando no es así, todo tan color de rosas, y uno se encuentra perdido, y necesita dar vuelta ese mapa y ponerlo patas para arriba para poder encontrarse en algun punto medianamente cercano a la realidad, a esa realidad que nos creamos mediante ese engaño.
Creo que lo principal para no dejarnos llevar por ese engaño y vivir toda la vida asi engañada es poder diferencialo lo más que se pueda, no creernos un 100% esa "realidad" y poder hallarse en el mapa sin la necesidad de darlos vuelta o al menos saber que estamos patas para arriba.

Germán A. Serain dijo...

Lucoso: Hay algo que me falta en todo esto... (¡cuac!)

Stella: Vos sabés... con esto del psicoanálisis es medio complicado decir cuándo uno hace las cosas a propósito o cuándo no.

Damián: ¿Un mapa idealizado y optro mapa real? ¿Cómo sería esto? ¿Hay mapas que son maás reales que otros? ¿Un mapa en escala 1:1000 y otro en 1:10, por ejemplo?

Julia: ¿Es mejor que la ficha no te caiga, entonces?

Marina: No, claro que no quiero que te deprimas. Y te planteo algo interesante en este sentido, como para que lo pienses: Ese deprimirte, ¿no es también un mapa, y por ende un eventual engaño?

Saludos a todos los que.

Unknown dijo...

Nuestra realidad es la forma en que percibimos las cosas. Si creemos que el mundo es al revés, en nuestra pequeña y parcial realidad sera así. Tarde o temprano esa realidad se enfrenta con una más grande (también parcial) y a veces tenemos que cambiar de parecer o fortalecemos nuestra postura. ¿Quien le puede decir a un diatónico que no es real que el verde es como es y no como lo ve el? Su realidad es así y a él no hay forma de explicarle que no es así. Yo soy católico y en mi realidad Dios existe. Como para otro no.
Yo creo que el que vivió esa situación amorosa que no dio resultado no estaba siendo engañado o confundido sino que vivía en una realidad que no termino enfrentándose con otra que no llegaba a ver.
Un amigo que tengo es meteorólogo y sabe de aviones, y el otro día me contaba que los aviones tienen radares de tormentas y que solo ven nitidamente la primer tormenta que se le presenta. Si hay una atrás la ven atenuada. Y yo creo que es algo parecido, nosotros vemos las cosas atenuadas por nuestra experiencia de vida (que nos forma y constituye) y lo que esté detrás esta siendo atenuado por eso.
Puede que, a fin de cuentas, estemos en lo correcto o bien lejos de como son las cosas realmente.
No lo sé, esta es mi realidad. Por ahora.

Cani dijo...

Para complejizar un poco la cosa, y relacionarla con las proyecciones Peters o Mercador de los planisferios. La imposición en las escuelas y en la Geografía de la proyección Mercador (y no la Peters u otras que existen) implica una forma de ver la realidad, una forma de engañar, en la cual los países del sur (América del S y África) parecen chicos, mientras los del norte (Europa y N. América) parecen más grandes de lo que son. Aquí hay un engaño que se impone por relaciones de poder.

Cuál es el rol de las relaciones de poder en el amor o en las relaciones de pareja?? Para mí es un rol CENTRAL. No me creo que cualquiera se pueda auto-engañar con cualquiera, hay que tener ganas de eso y ahí juega una relación de poder. Seamos sinceros: uno no se engaña con cualquiera, tiene q valer la pena ...

Lola dijo...

En mi experiencia, el engaño a mi misma y los mapas están relacionados a un nivel diferente. Porque no sólo me engañe con la persona que tenía al lado, a la cual llene de virtudes que yo sóla había creado y adjudicado, sino que lo seguí por diferentes países del planeta!

Cuando por buscarlo caminaba por las calles de lugares extraños, donde los mapas me resultaban totalmente inservibles porque no me mostraban nada parecido a lo real (las calles que parecían cortas era largísimas, había otras que ni siquiera figuraban) tendría que haber sospechado por lo menos que eso de lo no real no sólo era el mapa sino el amor que sentía por esa persona.

Quizá debería haber cursado esta materia antes de irme del país! así por lo menos tenía las defensas más altas para protegerme de...mi misma!

Lo bueno es que entre búsqueda y búsqueda no sólo conocí 7 países, si no que por lo menos me hice un mapa para conocerme a mi misma!

Hugo dijo...

Había una vez un hombrecillo desgarbado y muy feo.
(O por lo menos, él así se veía.)
Un día apareció una mujer hermosísima, la más hermosa del mundo.
(O por lo menos, él así la vio.)
Y mirándolo fijamente, le dijo que era el más bello de los hombres,
(O por lo menos, a ella así le pareció.)
Y el hombrecillo se transformó en el hombre más fuerte y hermoso del mundo.
(O por lo menos, él así se sintió.)

Julia dijo...

Noo, Germán, soy de las que voto por vivir en la realidad! De más chica vivía en mapas deformados, pero desp. de mi primera desilusión amorosa decidí que la realidad era la mejor compañía.

Ahora yo me pregunto o te pregunto Germán por qué todos lo relacionamos con amor???!!! (porque el lo relacionó con Messi es por amor también...al fútbol)
Uno se puede engañar pensando que está feliz en donde trabaja y no es así pero para que deprimirse si vas a tener que seguir yendo todos los días? O alguien que lo relacionó con la amistad, en esos ámbitos también se da el engaño a uno mismo...

SabryG dijo...

Pufff... cuantas veces vive uno "engañado"...y lo que es peor aún cuantas veces uno sabe que se está engañando y sigue enredado en el "engaño".
"Me siento re biennn!" Repetirlo y repetirlo hasta casi creerlo, porque peor es darse cuenta de que no es verdad.
Es como utilizar un mapa y comprobar(como decia Lola) que no se corresponde con la realidad, pero inevitablemente seguirlo observando, seguir guiandose por esa representación nefasta que no conduce a ningún lado.
Reconozco haber sido bastante "boluda" pero a pesar de eso creo que muchas veces es difícil olvidarse del mapa, de esa imagen construida que conservamos en nuestra mente, soltar el mapa y mandarlo a volar!

meru dijo...

Los mapas son producto de un punto de vista (o representaciones). Nuestra realidad ES una representación, no conocemos otra cosa. Asi que todo ese asunto de engaño me parece engañoso.
¿De qué engaño estamos hablando? Si la realidad es una representación, como mucho lo que nos puede pasar es que esa representacion cambie, se modifique, se reemplace, pero no vamos a acceder a una realidad más 'real' y por lo tanto, 'no engañosa'.
Y además pienso que cada crisis de nuestras representaciones ("el Otro no es lo que yo creía", para usar ejemplos puestos en este blog) es una instancia de aprendizaje, de ampliación de nuestra perspectiva, y en algunos casos, un empujón que nos corre y nos coloca en un lugar tan distante al que conocíamos que nos muestra nuestro mundo, patas para arriba.

Germán A. Serain dijo...

Eduardo: Creo que acertás en un par de cosas. Sobre todo en el "por ahora".

Cani: ¿Cómo determinás si vale o no la pena? ¿Y los que se engañan en relaciones enfermizas? Igual coincido en que todo parte de una base de poder. Pero hay que ver de dónde surge ese poder, entonces...

Lola: ¿Quién te quita lo bailado?

Hugo: Impecable.

Julia: Ok. Pero en realidad, nadie sabe a ciencia cierta qué cosa sea la realidad. ¿Por qué se engancharon con el tema del amor? Fácil: En parte porque yo además del mapa puse el cuentito de los hermanos gemelos. Además porque están todos cebados con que el tema del cuatrimestre está atravesado por el tema del amor. Pero sobre todo porque hubo un par a los que les cayó una ficha, como dijo alguien por ahí... Y el tame del amor, ya se sabe... Bueno, no me haga hablar del tema, que me compromete.

SabryG: Repetirlo y creerlo... ¿cuál es la diferencia con que sea verdadero? Te digo más: una de las técnicas básicas de la PNL es generar el cambio a partir de la puesta en discurso de uno de estos engaños cualesquiera.

Meru: ¿Qué quiere que le diga?... Ya ud. lo ha dicho todo. Aunque de manera engañosa, por cierto.

Saludos a todos, nos vemos en unas horas.

Meru (usualmente Meri) dijo...

Me quedé pensando y no creo Germán ni haber empezado a decirlo todo! Ja
Si bien acuerdo conmigo misma más arriba (nada de autoengaños), me olvidé de aclarar algo. Este tema de las representaciones no debe hacernos pensar en un solipsismo del tipo 'es verdad para mi' y listo. Porque como alguien hizo notar, las representaciones serán nuestras, pero de algún lado las sacamos. Algo asi como "¿qué representaciones armo con las representaciones con las que me armaron a mi?"... (?)
A lo que voy es que no por 'parcial' y siempre acotada a un punto de vista todas las representaciones son iguales ni tienen las mismas consecuencias.
Una vez me contaron esto:
En los años 50', en EEUU. hicieron una investigación. Le entregaron a varias niñas negras dos muñecas: una blanca, de porcelana, con naricita de botón, labios finos y rosaditos y cabellos rubios, y la otra, negra, de labios carnosos, ojos de azabache, cabellos negros y crispados
Se les pidió a las niñitas que eligieran una de las dos muñecas y TODAS las nenas que realizaron el experimento prefirieron la muñeca blanca. "¿Por qué?", les preguntaban los investigadores. "Porque son más lindas y más buenas", respondieron las nenas negras, de labios carnosos, ojos de azabache, cabellos negros y crispados...
O sea, asi como no hay realidad objetiva que esté a nuestro alcance, no hay representaciones objetivas y por lo tanto, no quedan excentas de las relaciones de poder.
Y en relación al patán de Kremer, el mapa no es el que está distorcionado; el distorcionado era él. Gracias por los siglos de humillación Kremer.

Maru dijo...

Hugo, me pasó algo tan similar a tu breve relato cuando conocí a mi ex novio. ¡Dios mío! Pensaba que tenía ante msi ojos un oasis en medio del desierto. Era realmente un mapa no muy parecido a lo que después fuimos develando el uno del otro (porque yo tampoco me mostré tal cual soy). Creo que esas situaciones pasan en toidos los órdenes de la vida (Fachadas, como diría Goffman). Pero cuando de amor o atracción se trata, la puesta en juego de las armas para la seducción plantean un panorama difernete al real. No sé si se hace de forma conciente o no.